El Bronce de La Manchasu origen y ocaso a través del análisis del territorio

  1. Cordero-Sánchez Lara, Estefanía
Supervised by:
  1. Alberto Mingo Álvarez Director

Defence university: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Fecha de defensa: 28 June 2024

Committee:
  1. María del Mar Zarzalejos Prieto Chair
  2. Francisco Martínez Sevilla Secretary
  3. Felipe Cuartero Monteagudo Committee member

Type: Thesis

Teseo: 846367 DIALNET lock_openTESEO editor

Abstract

El Bronce de La Mancha se desarrolló durante ochocientos años, entre 2.200 a.C. y 1.400 a.C. aproximadamente, en el territorio que en la actualidad ocupan las provincias de Ciudad Real, Albacete y sur de las provincias de Toledo y Cuenca. Se trata de una cultura particular y compleja, con varias tipologías de asentamiento, que suponen una adaptación al relieve y los recursos hídricos, facilitando la supervivencia de sus habitantes en un momento climático adverso. Esta tesis doctoral presenta un estudio global de la cultura del Bronce de La Mancha, en el que, por medio del análisis de una muestra compuesta por cincuenta y cinco asentamientos de distintas tipologías, incluyendo la totalidad de las motillas conocidas hasta el momento, se obtienen resultados extrapolables al resto de este territorio acerca de la existencia de patrones de distribución de asentamientos, las relaciones entre ellos, así como con el medio natural. Para ello, se ha dividido el amplio territorio de la región objeto de estudio en las comarcas naturales que lo conforman y se ha profundizado en las zonas de máxima concentración de asentamientos, que se localizan en la mitad nororiental de la actual provincia de Ciudad Real. Esta investigación se ha basado principalmente en el uso de los Sistemas de Información Geográfica (SIG). La tesis se estructura en doce capítulos y un anexo, en el que se incluyen las fichas individuales de los yacimientos que sirven de base para este estudio. En una primera parte, se realiza una síntesis de la evolución del conocimiento de esta cultura, partiendo desde las primeras investigaciones sobre ella, entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, hasta las últimas aportaciones, para presentar el actual estado de la cuestión. De igual forma, se lleva a cabo un planteamiento inicial con las características de esta cultura, sus modos de vida y las principales tipologías de asentamiento que la componen. Entre ellas se encuentran las motillas, una de las primeras formas de fortificación en llano que aparecen esta región y que han centrado buena parte de las publicaciones sobre esta cultura por su excepcionalidad. Así, el yacimiento mejor conocido del Bronce de La Mancha es la motilla del Azuer. Por su parte, los asentamientos en altura se han dividido tradicionalmente en morras y castellones, con notables ejemplos como el Cerro de La Encantada. Se constata también la existencia de lugares que no parecen tener funciones habitacionales y habrían estado relacionados con el culto funerario, como el Castillejo del Bonete. Dentro de las cuestiones abordadas en este trabajo de investigación, se analiza el origen del Bronce de La Mancha, partiendo de la evolución adaptativa a un cambio climático adverso del sustrato local calcolítico, así como las relaciones con otras culturas vecinas coetáneas, principalmente El Argar y el Bronce Valenciano, con las que se aprecian aspectos comunes, fruto de indudables influencias mutuas. A este respecto, resultan muy interesantes las zonas limítrofes, donde estas influencias son más notables. Se profundiza también en las relaciones de diversa índole existentes entre las distintas tipologías de asentamiento del Bronce de La Mancha, así como en la estrecha dependencia entre ellas y el medio natural que las rodea. El control del territorio y de los recursos disponibles en él parecen tener una importancia estratégica. El acceso a fuentes de agua para los asentamientos en llano, así como la utilización de elevaciones naturales y escarpes como complemento defensivo en los asentamientos en altura, resultan primordiales. Por otra parte, se analiza la existencia de un patrón de distribución de las motillas sobre el territorio, así como su posible conexión con los poblados en altura. Esta intencionalidad en la creación de una red de asentamientos, que supondría un control eficiente del territorio, sería indicativa de la existencia de una sociedad jerarquizada. La compleja edificación de los intrincados asentamientos fortificados de esta cultura, sumado al gran esfuerzo constructivo de su mantenimiento, son otro indicativo de ese sistema social estructurado. El trabajo de investigación aborda, por último, el colapso y desaparición de la cultura del Bronce de La Mancha. La remisión de la persistente sequía haría innecesaria la existencia de núcleos de explotación como las motillas, que quedarían anegados, en muchos casos, con la subida del nivel freático y supondría el final de una cultura ligada al control de los recursos hídricos.