Presencia de puntos gatillo miofasciales en futbolistas de competición con dolor de tobilloestudio piloto transversal

  1. E. Pérez Costa 1
  2. M. Torres-Lacomba 1
  1. 1 Universidad de Alcalá
    info

    Universidad de Alcalá

    Alcalá de Henares, España

    ROR https://ror.org/04pmn0e78

Revista:
Fisioterapia

ISSN: 0211-5638

Año de publicación: 2016

Volumen: 38

Número: 6

Páginas: 280-285

Tipo: Artículo

DOI: 10.1016/J.FT.2015.11.004 DIALNET GOOGLE SCHOLAR

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Resumen

Objetivo Valorar la presencia de puntos gatillo miofasciales (PGM), tanto activos como latentes, en 10 músculos de la pierna y del pie, en futbolistas de competición con dolor de tobillo, así como su relación con el dolor de tobillo. Participantes y métodos Diecisiete futbolistas con dolor de tobillo participaron en el presente estudio piloto transversal. Se exploró la musculatura de la pierna (el tibial anterior, el extensor largo de los dedos, el tibial posterior, el gastrocnemio medial, el flexor largo de los dedos, el abductor del dedo gordo, el tercer peroneo, el peroneo largo, el peroneo corto y el sóleo) en busca de PGM, tanto activos como latentes, siguiendo los criterios diagnósticos de Simons, Travell & Simons. Resultados Siete de los 170 músculos explorados en futbolistas con dolor de tobillo mostraron PGM activos, entre los que destacaron los del músculo tibial anterior (2/17) y los del músculo peroneo largo (3/17). Cuarenta y seis de los 170 músculos explorados en estos sujetos revelaron PGM latentes, los músculos más afectados fueron, el tibial anterior, el peroneo corto, el peroneo largo y el gastrocnemio medial. Conclusiones En los futbolistas de competición con dolor de tobillo existe una elevada frecuencia de PGM, principalmente en estado latente. Los músculos tibial anterior y peroneo largo, relacionados con la estabilidad del tobillo durante el golpeo del balón, y durante las acciones de carrera y cambio de dirección, son los más afectados. Se requieren estudios prospectivos de mayor tamaño muestral, que permitan corroborar la relación causal entre los PGM y el dolor de tobillo del futbolista de competición.