Un análisis empírico de la competencia en precios en el mercado de auditoría español

Resumen

Los procesos de fusión que han tenido lugar en el mercado de auditoría en los últimos años, mediante los cuales la sociedad ha sido testigo de la consolidación de grandes sociedades en otras todavía más grandes, no han hecho más que avivar el debate sobre el nivel de competencia que existe en el mercado de auditoría y la posibilidad de que las Grandes Firmas Internacionales ejerzan su poder de mercado para establecer los precios del servicio (Government Accountability Office, 2003, 2008; Financial Reporting Council, 2009; Comisión Europea, 2010; Competition Commission, 2013). Por todo ello el objetivo principal de esta tesis es analizar si la estructura que presenta el mercado de auditoría español influye en la determinación de los precios del servicio. Para ello, realizaremos diversos análisis que nos permitan profundizar en dicha cuestión. En primer lugar, analizamos si la existencia de una elevada concentración en el mercado de auditoría español permite a las Grandes Firmas Internacionales obtener mayores honorarios por la prestación de sus servicios, tal y como apuntan algunos estudios previos sobre honorarios en nuestro país (Monterrey y Sánchez, 2007; De Fuentes y Pucheta, 2009). Los resultados obtenidos ponen de evidencia que las Grandes Firmas de auditoría sí reciben mayores honorarios que el resto de firmas de menor tamaño. En segundo lugar, a raíz de estos resultados, analizamos si dichos sobreprecios son debidos al ejercicio del poder de mercado por parte de dichas firmas o, por el contrario, por la percepción de una reputación diferenciada en la prestación de sus servicios por parte de las empresas auditadas (Danos y Eichenseher, 1982, 1986; Willekens y Achmadi, 2003; Bandyopadhyay y Kao, 2004; Feldman, 2006). Tras realizar los análisis oportunos hemos obtenido evidencia de que la existencia de una elevada concentración en el mercado no influye en los honorarios que las firmas cobran por sus servicios, por lo que aparentemente no ejercen poder de mercado. Sin embargo, sí podemos concluir que dichos mayores honorarios provienen de un efecto diferenciación, es decir, los clientes perciben una calidad diferenciada en función de las distintas firmas que prestan el servicio, por la que están dispuestos a pagar más. En tercer lugar, existe evidencia que indica que estructuras de mercado concentradas pueden encubrir una intensa rivalidad entre las empresas líderes (OXERA, 2003) y, por tanto, enjuiciar el nivel de competitividad del mercado utilizando únicamente variables de naturaleza estructural, como la concentración, puede inducir a error (Baldwin y Gorecki, 1989). El hecho de que la concentración resulte no significativa en el establecimiento de los honorarios, puede significar que realmente las grandes firmas no estén imponiendo su poder de mercado o que las medidas de concentración no sean lo suficientemente robustas como para inferir niveles reales de competencia a través de ellas. Por lo que nos planteamos analizar si medidas dinámicas del mercado afectan a los honorarios de auditoría (Cabral, 1997; Sharma y Bal, 2010). Los resultados que obtenemos indican que a pesar de encontrarse el mercado muy concentrado, existe movilidad, luego hay competencia entre las firmas. Si bien, la existencia de honorarios superiores sigue siendo debida a un efecto diferenciación y no al tipo de estructura que posea el mercado. Por último, si la estructura del mercado de auditoría no influye en el establecimiento de los precios, si no que se trata de un efecto diferenciación por reputación, cabe preguntarse si todas las Grandes Firmas poseen el mismo nivel de reputación o, si por el contrario, sólo una es capaz de imponer los precios del servicio (White, 1981; Carlton y Perloff, 1990; Francis et al., 2005; Monterrey y Sánchez, 2007). En este sentido, analizamos si el mercado de auditoría español funciona como un mercado de empresa dominante o no, es decir, si existe una firma líder capaz de controlar un amplio porcentaje del mercado. Los resultados obtenidos indican que dentro del conjunto de Grandes Firmas, la empresa dominante es la única capaz de establecer los honorarios del servicio, aceptando el resto de firmas el precio establecido por ella. Lo que nos permite concluir que el mercado de auditoría español es un oligopolio de empresa dominante.