Neoliberalismo y polarización socialMéxico, EE.UU., Francia y España, (1973-2013), en perspectiva comparada

Laburpena

La tesis se centra en el tema de la desigualdad económica. Su objeto de estudio básico es analizar las políticas públicas -en el ámbito fiscal, sobre el gasto público social y el mercado de trabajo - llevadas a cabo por los gobiernos de México, EE.UU., Francia y España durante el período 1973-2013 y su incidencia en la desigualdad de estos países. La hipótesis central de la investigación propone la idea de que el nuevo modelo económico basado en la ortodoxia neoliberal -surgido a partir de finales de los años setenta del siglo XX y profundizado en las décadas siguientes, centrado en la puesta en marcha de un proceso de ajuste estructural cuyos ejes principales serían el ajuste fiscal; la liberalización comercial; la reforma del sector financiero; las privatizaciones, y la desregulación laboral, y aplicado con especificidades en cada país¿ ha generado una mayor polarización económica y social. De acuerdo con esta hipótesis, se establece una ligazón entre las políticas públicas desarrolladas y articuladas con arreglo al nuevo paradigma económico y la mayor desigualdad. En esta hipótesis subyace la importancia que se da a la intención política y al papel de las políticas gubernamentales. Según nuestra interpretación, desde la Historia, esta desigualdad no surge de un proceso "natural", fruto de la actuación de las fuerzas del mercado, sino que es el resultado de medidas de naturaleza política. Se parte de la premisa de que los gobiernos pueden influir decisivamente en las rentas de las personas y las familias, y consecuentemente sobre la desigualdad económica, mediante una triple vía. En primer lugar, disminuyendo una parte de las mismas a través de los impuestos. En segundo lugar, incrementándolas por medio de prestaciones sociales. En tercer lugar, actuando directamente sobre las rentas primarias recibidas en el mercado de trabajo, en función de una serie de factores asociados al nivel de centralización o desregulación del mismo así como otros de índole institucional (costes de despidos, salarios mínimos, densidad y poder de los sindicatos, entre otros). Por otro lado, se sostiene que esta situación, lejos de ser coyuntural, tiene carácter estructural, y responde a un modelo de sociedad que se comenzó a perfilar con la eclosión de la gran crisis del modelo económico de postguerra y la recesión mundial a finales de la década de 1970, que marcó el advenimiento a los espacios económicos y políticos de la ideología neoliberal. La investigación ha puesto de relieve que el marco general de desarrollo de las políticas públicas durante el período bajo análisis se ha acomodado a los parámetros del laissez faire propios del neoliberalismo en los cuatro países. En todos los casos, durante la década de los años de 1980, se produjo un cierto giro en sus políticas con respecto a los años anteriores que cabe relacionarlas con la ortodoxia neoliberal. Igualmente, se ha confirmado que las políticas públicas aplicadas por los gobiernos de estos países han tenido una repercusión sobre la desigualdad económica, en muchos casos, en sentido negativo. El efecto redistributivo de las políticas públicas se han producido fundamentalmente por las iniciativas y reformas del mercado de trabajo, que han sido determinantes en el reparto primario de la renta, así como por la política fiscal y la política sobre el gasto público. Este crecimiento de la desigualdad en las rentas primarias no ha podido ser compensado, de un modo general, a través de intervenciones redistributivas en el ámbito fiscal, sucediéndose, por el contrario, reformas impositivas que redujeron la progresividad del sistema tributario junto a políticas de austeridad e importantes recortes en el sistema de transferencias sociales.