Determinantes de la salud reproductiva en mujeres adultas

Résumé

Introducción: Los factores genéticos, endocrinos, ambientales y el estilo de vida juegan un papel crucial en la salud reproductiva femenina. La investigación actual resalta el potencial de la dieta en la etiología de las enfermedades ginecológicas. Además, cabe señalar la importancia de la exposición prenatal en el desarrollo posterior de diversas patologías. En este caso, la distancia anogenital (DAG) se considera un marcador útil para evaluar el desarrollo y la función genital, ya que la DAG al nacer refleja la exposición hormonal prenatal y predice la DAG en la vida adulta. Por lo tanto, la DAG podría ser relevante en el diagnóstico, tratamiento y pronóstico de diversas enfermedades ginecológicas. Los objetivos del siguiente trabajo fueron: 1) analizar la asociación entre la ingesta de grasas y la presencia de síndrome de ovario poliquístico (SOP) y sus diferentes fenotipos, 2) evaluar la relación entre la DAG y los niveles de diferentes hormonas reproductivas y 3) examinar la asociación entre la DAG y la presencia de cáncer de mama, así como con las diferentes características del tumor. -Material y métodos: Se utilizaron distintos estudios relacionados sobre salud reproductiva femenina para llevar a cabo la presente tesis doctoral. En primer lugar, se realizó un estudio de casos y controles en el que se incluyeron 276 mujeres, 121 pacientes diagnosticadas de SOP y 155 controles que asistieron a consultas de ginecología para revisiones rutinarias. El siguiente trabajo fue un estudio transversal realizado en 2017 con una muestra de 300 mujeres estudiantes de la Universidad de Murcia. Se recogieron medidas de la DAG ano-clítoris (DAGAC) y la DAG ano-horquilla vulvar (DAGAH) y se extrajo el mismo día una analítica sanguínea para cuantificar los niveles séricos hormonales. El tercer estudio se desarrolló con pacientes afectadas por cáncer de mama mediante un estudio piloto tipo caso-control, en el que participaron 70 mujeres, con 40 casos y 30 controles. Se recogieron datos clínicos, oncológicos y ginecológicos y se realizaron mediciones de la DAGAC y DAGAH. Para llevar a cabo todas estas evaluaciones se utilizaron distintos análisis estadísticos, incluyendo pruebas bivariantes paramétricas y no paramétricas y regresión lineal y logística múltiple. -Resultados: En el estudio de casos y controles de SOP, no se encontró ninguna asociación entre la ingesta de grasas y la presencia de SOP, pero sí se observaron relaciones significativas para algunos fenotipos del SOP. El fenotipo definido por hiperandrogenismo + oligo/amenorrea + morfología poliquística ovárica se asoció con una mayor ingesta de grasas poliinsaturadas y omega-6; y la mayor ingesta de grasas saturadas con el fenotipo de hiperandrogenismo + oligo/amenorrea. Respecto al estudio transversal sobre niveles hormonales y su relación con la DAG, no hallamos ninguna asociación estadísticamente significativa entre la DAG y las diferentes hormonas séricas. Únicamente se vislumbró una tendencia positiva entre la hormona antimülleriana (HAM) y la DAGAH. La HAM aumentó 0,033 ng/ml por cada 1 mm de la DAGAH, con un p-valor de 0,19. Por último, en el estudio realizado con pacientes con cáncer de mama y controles, se observó que presentaban una longitud de la DAG más corta que los controles. Concretamente, viendo diferencias estadísticamente significativas en cuanto a los valores de DAGAC. Sin embargo, no se encontraron diferencias entre la DAG con respecto al subtipo, la agresividad o el estadio del cáncer de mama. -Conclusión: Una mayor ingesta de ácidos grasos específicos está relacionada con algunos fenotipos del SOP, sugiriendo que las intervenciones nutricionales podrían ser más beneficiosas para ciertos fenotipos del SOP. Diferentes estudios sugieren que hay una asociación entre la longitud de la DAG y varios aspectos de la salud reproductiva y hormonal en las mujeres. No obstante, en nuestro estudio no se observaron asociaciones entre la DAG y los niveles séricos de hormonas reproductivas. Además, la DAG, ha empezado a utilizarse como herramienta diagnóstica en diversas patologías femeninas, observando en nuestro estudio piloto que las pacientes con cáncer de mama presentan una DAG acortada.